domingo, 15 de mayo de 2011

BACH: ETERNO

(Eisenach 21.03.1685, Leipzig 28.07.1750)


No sé exactamente cuando escuché por primera vez a Bach, probablemente muy niño, junto a mi querido tío Waldo, un melómano consumado, quien había acondicionado acústicamente, una habitación de su departamento para  escuchar tranquila y profundamente la música que él tanto amaba. Luego pasarían años antes de reencontrarlo, ya de joven con mi primo y escultor Pablo, solíamos tener largas sesiones musicales escuchando con discos de vinilo a Bach,  lo entretenido era que además la escuchamos junto a los más variados géneros de la música “popular”.



¿Quién es Bach para mi? 

Uno de los más grandes maestros de la Humanidad; uno de aquellos seres que no pueden ser superados, porque en él se encarnan por decirlo así, el sentimiento y el saber musical de toda un época, y “al cual – según la feliz frase de Schumann – la música debe casi como una religión a su fundador”. Además la personalidad artística de Bach, adquiere una importancia trascendental porque en ella los estilos de dos épocas distintas han alcanzado a la vez su más alta florescencia y, cual enorme efigie se eleva entre ambas como un coloso. 


Porque Bach pertenece con igual derecho al anterior período de la música polifónica, de estilo imitativo y contrapuntístico, que al subsiguiente de la música armónica. Su existencia tiene lugar en un periodo de transición, es decir en un tiempo en que mientras el antiguo estilo imitativo subsiste todavía, el nuevo se halla tan solo en sus albores y muestra aún las huellas de lo imperfecto. El genio de Bach logro aliar y fundir de tal manera las particularidades de ambos estilos que su obra subsistirá eternamente como una forma ideal, un canon ejemplar para el arte musical de todos los tiempos. 

La música de Bach no ha envejecido aún; a lo sumo podría decirse que algunos de sus accesorios externos, ciertas cadencias, ornamentos, etc., eran fruto de su época y nos recuerdan el pasado. En cambio su invención melódica es tan original e inagotable, su rítmica de una variedad y una vida tan intensas, su armonía tan selecta, tan audaz y con todo tan clara y diáfana, que sus obras no sólo son objeto de la admiración, sino también del  mas fervoroso estudio y la emulación de los músicos de nuestros días y lo serán sin duda, en lo futuro por espacio de muchas generaciones. 


La producción musical de Bach, es inmensa, dentro de las más destacadas podemos mencionar en primer término sus “Cantatas religiosas”, de las cuales escribió cinco ciclos completos para todos los domingos y festividades solemnes (59) por año, que sumaban cerca de 300 cantatas, pero por desgracia para el arte, se han perdido más de un centenar. Asimismo de las 5 Pasiones que compuso no se conservan más que 2. A estas obras de grandes dimensiones se junta la incomparable Misa en si menor, que con otras 4 Misas breves es todo lo que resta de lo mucho que escribió para la iglesia católica de Corte de Dresde (la Corte era católica en un país protestante). 
 
Añádase el gran Magnificat, 3 Oratorios y un gran número de Lieder espirituales que completan la copiosa creación de Bach en la música vocal sagrada.

En sus composiciones instrumentales,  también encontramos a un Bach muy fecundo,  preludios, fugas, fantasías, tocatas, partitas, “suites”, conciertos, sonatas,  cánones, oberturas, etc. para un amplísima gama de instrumentos (prácticamente todos los de la orquesta). Tanto en la música vocal como la instrumental, es Bach el legítimo heredero del tesoro artístico de los siglos pasados, para perfeccionarlo abarcándolo todo y espiritualizando con la más clara inteligencia todas las funciones armónicas que en formas mayores o menores emanaban del período de la polifonía; sobre todo en la forma de fugas llevada por él a la última perfección. 


Destaquemos especialmente a las grandes Fugas para órgano, como también las contenidas en “El Clavecín bien temperado” (48 preludios y 48 fugas en 2 partes, cada una de las cuales contiene un preludio y una fuga en todos los tonos mayores y menores) monumento imperecedero debe constituir el vademécum de todo pianista, y en “El Arte de la Fuga” (15 fugas y 4 cánones sobre un tema único). Igualmente único es Bach en sus 6 grandes Suites, para violoncelo solo y en sus 3 sonatas y 3 partitas para violín.




Variaciones Goldberg

Mención especial merecen las famosísimas “Variaciones Goldberg”. Bach terminó de componerlas en 1742, cuando ocupaba el puesto de Kan­tor en la ciudad de Leip­zig. Según relata su bió­grafo Johann  For­kel (biografía publicada en 1802), las varia­cio­nes fue­ron encar­ga­das a Bach desde Dresde por el insomne conde Her­mann Carl von Key­ser­lingk para que el cla­vi­cor­dista de su corte, Johann Gottlieb Gold­berg, le complaciera con su música durante las noches. Según este relato, el conde recom­pensó muy generosamente con una copa de oro que con­te­nía un cen­te­nar de “luises de oro”, prácticamente el sueldo de un año de la época de Bach.

¿Por qué es tan importante esta pieza...? 
No solamente muestra la madurez artística que había alcanzado Bach, sino que para muchos,  se trata de música pura, sin pro­pó­sito narra­tivo alguno, pero que sin embargo encie­rra en sus incontables jue­gos de opo­si­cio­nes la vida entera: la luz y las sombras, la vida y la muerte, el amor, la sole­dad, la nostalgia y sobre todo, el sueño y la razón, el arte como pro­pó­sito de una vida y al igual que ella cambiante y a la vez cíclica. Por lo cual, seguramente sea una pieza única, ya sea en las manos de Claudio Arrau, Glenn Gould o de Keith Jarret es también todas y cada una de las veces que se escu­cha igual y diferente. Frente a las monu­men­ta­les obras cum­bres del barroco: La Pasión según San Mateo y El Mesías de Heandel nos encon­tra­mos ante una obra que aún escrita para un ins­tru­mento de salón con­tiene una música que asom­bra. Aún hoy des­lum­bra, y posi­ble­mente lo siga haciendo por muchos años en el futuro, como nuestro eterno BACH.


Los primeros ocho compases del aria.








Fuentes:
Diccionario de la Música - Ed. Labor - 1954
http://es.wikipedia.org/wiki/Johann_Sebastian_Bach
http://www.redondomartin.com



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